martes, 6 de septiembre de 2011

De cosas: almohadas, pensamientos y despedidas

Mirando una semana atrás, fijo la vista en una conversación sobre almohadas y colchones, en ella salió una broma a propósito de las almohadas ergonómicas; alguien comentó: "sería un buen invento una almohada que tuviera memoria de todo lo que pensamos durante la noche", entonces, a la mañana siguiente nos indicaría lo que hemos pensado, de tal manera que no olvidaríamos los pensamientos más interesantes y útiles. Dudo de la posibilidad de realizar un invento así, aunque quién sabe, ya nos pueden sorprender con cualquier cosa. Lo que nadie puede dudar es que los pensamientos se pierden, al menos los míos, si dicen que las palabras se las lleva el viento, no quiero decir de los pensamientos.


En la cama, por la noche tiene lugar un momento donde uno piensa muchas cosas y luego pone poco en práctica esos pensamientos, se pierden: algunos brotan de la nada con un inicio prometedor pero se quedan ahí, la mente se impacienta, no prosiguen, pasan al olvido y el vacío mental queda invadido por recuerdos o de repente entra otro pensamiento, alguno tiene la suerte de terminar en una idea con estructura y sentido, la mayoría de estos pasan a formar parte del cofre de pensamientos y recuerdos de la almohada (sí, de ese cofre que tiene una contraseña que sólo conoce el subconsciente y alguna parte desconocida de nuestro cerebro), en otras ocasiones los pensamientos pueden ser plasmados en papel si disponemos de él y le echamos las ganas necesarias para levantarnos de la cama y escribir.

Sin duda el verano es otro de esos períodos donde uno dispone de momentos (incluidos los de por la noche) para darle vueltas al tarro queramos o no. Sobre todo, por la ociosidad en la que nos encontramos gran parte del tiempo algunos días.

En definitiva, en cualquier fecha del año y momento del día, muchos de los pensamientos que tenemos vienen de cosas que escuchamos, cosas suceden a nuestro alrededor, situaciones en las que nos vemos envueltos, circunstancias inesperadas que nos tocan el corazón o nos lo golpean.

Son, precisamente, las situaciones que golpean o tocan nuestro corazón las que más repercuten en el inicio, forma y contenido que toman los pensamientos más profundos, y son estos pensamientos los que más hacen cambiar a las personas.

Quizá vuestro interior se pregunte qué ha golpeado y tocado mi corazón recientemente. Entre estas dos acciones hay abismo y un escaloncito a la vez: el abismo es el que hay entre la muerte y la vida, los escaloncitos que hacen de unión entre los dos son la tristeza de las despedidas y la esperanza.


El golpe se produjo hace unas semanas cuando me enteré de la muerte de un compañero de baloncesto por cáncer, tenía mi edad, dieciocho, realmente no le conocía mucho, únicamente nos habíamos cruzado en no más de 5 ó 6 ocasiones en encuentros deportivos y alguna vez que otra por tuenti. Primero, la noticia de su enfermedad; después el saber que seguía adelante y que era muy muy querido; meses después, mi felicitación por su cumpleaños y hace unas semanas una impresión que me cruza el pecho al conocer la tragedia. Para mí es inevitable el haberme imaginado en su situación y preguntarme si estoy aprovechando mi vida. La respuesta no termina de salir. Por otra parte pienso que mi fe y la de muchos da una visión diferente a la dada por un aparente final. La respuesta de la fe es la esperanza.

Lo que ha tocado mi corazón dejando una huella difícil de borrar ha sido el paso por mi vida de un compañero, un amigo, un hermano en la fe que ahora se separa en la distancia. De este hermano no puedo decir que haya compartido mucho tiempo con él tampoco. Sin embargo, mi corazón actúa ante su  marcha como si hubiera sido más tiempo, esto me hace pensar que deben haber sido muy intensos y especiales los momentos que he pasado en compañía de él, es por eso que mi corazón cree que ha sido más, ya que no estoy acostumbrado a vivir con gran intensidad  los acontecimientos que se van presentando a lo largo del día desde que despierto hasta que vuelvo a despertar. La esperanza con respecto a este amigo es distinta a la del  otro; (pero al mismo tiempo y como cualquier esperanza desconocida por ahora, indemostrable y posible) esta por su parte busca que nos volvamos a encontrar en un futuro. Un futuro que pienso, imagino y localizo como instante, pero que no logro colocar en medio de un lugar del amplio mundo. Sólo sé que ese lugar reunirá amistad, alegría, timidez, sorpresa, curiosidad y felicidad.

Ahora, me doy cuenta de que sólo me queda esperar con fe, lo supe cuando noté que mis deseos perdían su fuerza por el viento del tiempo y mis lágrimas la ganaban por la densidad de la gravedad.

"Siente el pensamiento, piensa el sentimiento. Pensar es como vivir dos veces" (Miguel de Unamuno)

miércoles, 3 de agosto de 2011

Conclusiones sobre la crisis del Cuerno

El verano me indigna; gracias a él tengo la oportunidad de "disfrutar" de algún programita de Telecinco, de esos que suben el share y llenan el bolsillo de la cadena, también me ha brindado la oportunidad de tener tiempo para informarme un poco mejor que antes de lo que ocurre en el mundo, que suelen ser desgracias, especialmente en este mes de Julio, que hemos dejado hace unos días, no han cesado de ocurrir una tras otra, las más recientes: la amenaza de quiebra de los EE. UU. y la que peores consecuencias tiene, la crisis alimentaria que afecta a millones de personas en la zona llamada el Cuerno de África (este artículo que os puede poner un poco al "día" es de hace un mes, y hasta hace poco menos de una semana apenas nadie había escuchado hablar de tal situación, esto da a entender como los medios televisivos dan la importancia que ellos creen que merece cada cosa en función de SUS INTERESES, principalmente económicos).

La pregunta ahora puede ser respecto a la crisis del Cuerno: ¿Hay esperanza?, teniendo en cuenta que los países más desarrollados están sufriendo crisis que les provocan deudas que habrá que sufragar en años, la esperanza es débil, ya que la gente no sólo del Cuerno sino cualquiera que esté al límite no tiene el lujo de vivir los años que nos quedan a nosotros por pagar las deudas. Si le sumamos que estos países ricos en épocas de bonanza no han movido ni medio dedo por prestar ayuda a los subdesarrollados, entonces podemos pensar que hasta que no se les ocurriera robarnos los recursos para cambiar las tornas no tendrían cierta estabilidad, y una vez que se hubieran encontrado en esa estabilidad, ¿por qué habrían de ayudarnos?, si esta situación se diera seguramente tampoco nos rescatarían, igual que nosotros les negamos, ellos lo harían de la misma manera, en todo caso posiblemente tendrían ellos más probabilidades de ayudarnos ellos a nosotros que como viene sucediendo. Volviendo a la realidad, lo que sí es cierto es que esta situación que nuestros hermanos africanos están sufriendo era inevitable, ya que no tenían nada a lo que atenerse, sin embargo si nosotros nos encontrásemos en su lugar contaríamos con recursos suficientes para salir adelante y en ningún caso hablaríamos de millones de muertos.

Antes no me he expresado bien, pido perdón, lo que me indigna no es el Verano, sino que en éste se haya dado más valor a casi 90 vidas occidentales que ha miles de vidas africanas que mueren diariamente por nuestra culpa.

Gracias por vuestro tiempo, espero que seáis felices. Os dejo un vídeo que he preparado en homenaje a los damnificados en África, es un poema de amor, pero destinado a ellos; en él aparece un número de cuenta por el que podemos colaborar:


"Dichosos los que sufren, porque ellos serán consolados" (Mt 5, 5)

miércoles, 20 de julio de 2011

Poesía social, vital y experimental

Si os habéis fijado, hace semanas que el blog cuenta con una página donde van apareciendo algunos días de forma sorpresiva poemas que también pueden ser comentados. Digo esto porque ahora me toca publicar algo y predicar con el ejemplo, lo hago con un poema propio o un intento de ello. No me atreví a mostrarlo antes porque me daba algo de vergüenza, pero allá va, gracias a la valentía que me da el ser escuchado con compresión me decido a hacerlo.

Es posible que os quedéis con ganas de conocer el sentido de algunos versos que no entendáis bien, por lo que os invito también a que preguntéis acerca de expresiones, dudas o curiosidades. Para definir el tipo de poesía del poema he utilizado el mismo título de esta entrada (poesía social, vital y experimental [lo de experimental porque soy novato y personalmente experimento]), quizá pueda ilustraros y adentraros mejor en el poema. No está lleno de musicalidad y ritmo como puede ser frecuente, pero se intentó que al menos fuera ligeramente agradable para el lector. ¡Espero que sea leve y vosotros felices!

MARAVILLA IMPREDECIBLE

Indudable,
como la fe,
que vierte su esencia invisible
en el vaso medio lleno de culpabilidad e inocencia.

Inflamable,
colosal fuente de sentido vital,
terremoto de felicidad ardiente;
y es que así fue,
por las continuas, contagiosas, frescas quemaduras del tejido del alma.
Ínfimo quedó el alcance del fuego metálico,
ambiciosa patente de cazadores silenciosos
de cilindros unidimensionales.

Imprudente,
decidió cambiarse por nada, por tanto, por todo;
entre todo, se dejó ver una sonrisa,
devolviéndose a la vida, devolviéndome a la vida, devolviéndonos a la vida.
Nos convirtió en cobardes atrevidos. Imprudente.

Imprescindible,
aunque de agua no hablo, no,
toda la sed arrancó,
mas una semilla sembró, cuya flor
con el vaso, ahora lleno regó,
exceso de agua siempre fue malo,
mas no siendo éste, esta flor nunca se ahogó.

Imprescindible:
dámelo, pero quédate con él,
porque no es de los dos,
llámale, ¡aleluya!, díselo,
que por Dios vino a todos,
¡eterna confusión!
No parece, lo es, AMOR.

miércoles, 6 de julio de 2011

Historia en una sala de espera

Creí que nunca diría esto; "siento frustración por no haber podido dedicar una tarde de verano para leer un libro", la historia que explica esta frase la situamos en el tiempo en el día de ayer, la mayor parte del desarrollo de ésta tuvo lugar en una sala de espera:


No he podido escoger peor día para comenzar a leer un buen libro, y es que precisamente ayer tenía revisión en Badajoz, con el oftalmólogo (el médico de los ojos de toda la vida) a las cinco de la tarde. Y cómo no, me llevé la novela recién empezada a la consulta porque había previsto el largo tiempo de espera típico que hay en todas las salas de espera típicas (sean para lo que sean). Cuando empecé a leer me di cuenta de que había tanta gente a mi alrededor que podía pasar un rato curioso y ameno observando los rostros y gestos de los demás disimuladamente (como era la costumbre) o simplemente charlando con mi hermano, pero no, decidí concentrarme en las páginas de la novela que ahora tocaban después de las leídas horas antes en el coche y en casa. No tardé en plantearme mi decisión, ya que al mismo tiempo empecé a sentir inquietud por escuchar una conversación entre mis padres y una tía segunda, una tía segunda de esas que aparecen un día en una sala de espera y que no conocías, pero te alegras de conocerla y la saludas amablemente.

Hasta ahí todo bien para mí; sigo leyendo, con los típicos despistes que le ocurren a uno cuando lee un libro en silencio y está escuchando hablar a 3 personas justo en frente. A continuación pasó algo que yo odio (no sé si vosotros): estar embelesado y entretenido en una cosa y de repente oír tu nombre sabiendo que debes hacer caso. Por lo que dejé el marcapáginas en medio de dos hojas, aunque daba la casualidad de que no había terminado ninguna de las dos páginas (típico también), aun así puse el marcador entre las dos.

Entro, pues, a una habitación, pongo la cabeza en varios aparatos, cierro un ojo, abro otro, miro para un lado, miro para otro y finalmente paso a otra sala donde la señorita que me había atendido me echa una gota en cada ojo de algo que escuece un poco al principio. Al salir de la sala a la otra sala, la de espera, todavía secándome las lágrimas producidas por el líquido me siento y me acoplo en la conversación de mis padres, me adentro tanto que se me olvida el libro. Esta vez tengo a mi madre al lado y es al mirarla cuando la veo borrosa cayendo así en la cuenta de las gotas. También a mi madre le ocurría lo mismo, alejándome pude ver sus pupilas dilatadas. Llegó mi hermano de la sala de las gotas y sí, igual. Maldije las dichosas gotas por impedirme ver con claridad todo aquello que no se encontrara a más de medio metro de mis ojos, así es; no podía leer una novela a esa distancia de mis ojos (esto sí lo puede probar cualquiera). Este último momento de espera a la siguiente llamada lo dediqué a enredar intentando verme las pupilas en el espejo del cuarto de baño, leer cualquier cosa que estuviera a mi alcance, ver la cara de mi hermano emborronada como una foto mal hecha, aunque lo más curioso y molesto ocurrió después de que nos examinara por última vez el oftalmólogo y me dijera que tenía bien la vista y que cuidara la conjuntivitis: al salir de la clínica la luz me cegaba más que nunca y todo lo que era blanco o claro reflejaba la luz de tal manera que mi hermano, mi madre y yo caminábamos con los ojos casi cerrados (¡menuda estampa contemplaría mi padre!), en ese momento me vino a la cabeza el Mito  de la caverna de Platón y cómo debería sentirse el hombre recién desencadenado y deslumbrado por la luz del Sol.


Este es el final de la historia: mi padre, que tiene miopía, al salir nos comentó que desearía tener la visión de alguno de nosotros tres (a ninguno después de la revisión nos han puesto gafas), y fue él mismo quien nos trajo de vuelta a casa en el coche, con sus gafas puestas como siempre, por supuesto.

A quien le haya resultado corriente esta entrada que no se preocupe, es porque es así. Me despido deseándoos unas felices vacaciones (quien las tenga) o simplemente que seáis felices siendo personas corrientes y con un pequeño fragmento de la novela que me dejó casi incrédulo y asombrado pero que volví a leer al final del día con una sonrisa (en verdad no sé por qué),  la novela la empecé ayer por la mañana y me encargaré de terminarla este mismo verano: 

"Con frecuencia las personas, incluso las peores, son más inocentes, más simples de lo que pensamos. Y por otra parte, nosotros también". (F. Dostoievsky)

jueves, 28 de abril de 2011

Transformarse

Muy buenas, esta vez vuelvo con pocos temas que tratar por eso he querido rescatar un cuentecito, he querido llamarlo metalegoría (algo así como más allá de una alegoría/metáfora). Aquí dejo la composición, el título es lo subrayado:

¿Que no hay milagros todos los días?

Allí estaba ella, la señorita Humildad cerró la puerta del hall, y tan risueña como siempre emprendió lo que venía siendo desde hace meses su andadura diaria. Empezó caminando correctamente y sin llamar mucho la atención por la acera; en cuanto a su vida, la gente que pasaba más tiempo con ella la conocía como una chica tímida, pero que tampoco se reservaba demasiado.

Era una chica sencilla y ciertamente un poco recatada, inocente pero sin pecar de ingenua, llamaba la atención su respeto y cariño por todas las personas, enormemente generosa, amable, también hermosa de corazón, e increíblemente servicial, siempre estaba dispuesta a atender a cualquiera que pudiera precisar de ella. Su recurso más utilizado: la sonrisa, se notaba que cada vez que lo hacía era con amor, eso la hacía todavía más hermosa por dentro y por fuera de lo que era. Transmitía paz. Por otra parte, las personas de su alrededor también sabían de sus puntos débiles: carecía de popularidad, aparentemente no sobresalía en nada, no era nada vanidosa, situación que unida a su personalidad la convertía en una persona inerme ante los ataques de los demás. En muchas y desgraciadas ocasiones había salido malparada durante su época en el instituto, debido a la crueldad de sus compañeros que la utilizaban como modelo de pardilla, quedando ridiculizada por el poder de la palabra de las personas, que no apreciaban ni se habían fijado en sus admirables cualidades.

Humildad, al igual que el resto de días del curso, se dirigía a la universidad por las mismas calles que estaba acostumbrada a hacerlo, aunque todavía resultaban un poco desconocidas para ella al igual que su nueva residencia. Pero este día no fue igual que ninguno de los anteriores que había pasado en esa ciudad. Para sorpresa de Humildad al cruzar la segunda esquina que debía pasar en su trayecto diario apareció de nuevo en su vida aquel compañero del instituto que tanto le había hecho sufrir y al que ya había olvidado, Orgullo. Lo reconoció en seguida, seguía siendo igual de atractivo y tentador, vio en él rápidamente a aquel chico del que había estado enamorada años y que se aprovechó de su candidez y buena voluntad durante los años de instituto; él no veía en la dulce Humildad a una chica a la que halagar, apoyar o simplemente respetar, sino que lo que hizo fue aprovechar los sentimientos hacia él para jugar con ella, a pesar de ello, Humildad siguió confiando en la buena fe de las personas que reclamaban su atención.

Orgullo era un chico bastante carismático desde que entró en el instituto, tenía mucho éxito con todo el mundo, especialmente entre las féminas, era un seductor, un chico chistoso y simpático con la gente que estaba bien vista, lo que influyó más tarde en que fuera muy prepotente y arrogante con las personas que él consideraba inferiores; tenía todo lo que un chico de su edad pudiera desear: diversión, fama, chicas y hasta inteligencia, cualidad que utilizaba para burlarse y humillar a gente como Humildad de tal modo que no supieran salir de sus trampas. Según sus colegas y la mayoría de los compañeros era buena gente, un bonachón, también se decía que hacía favores si alguien le ofrecía algo a cambio, con esto, los chicos de su edad preveían que iba a tener mucho éxito económico en el futuro y que sería un astuto triunfador. A Orgullo le encantaba que los demás le piropearan, le gustaba sobresalir, lo que llegó a hacer de él un ídolo en su último año en el instituto: un ejemplo para todo chaval adolescente. Además eran muy comentadas sus victorias amorosas todas las semanas con chicas incluso mayores que él, por esto con el paso del tiempo no aceptó ningún rechazo. Cuando llegó a la universidad pronto se extendió su nombre por todo el entorno. Pensaba que mejor no le podía ir.

En los primeros instantes, ambos hicieron una pausa en su caminar, y cuando mantuvo la mirada sobre él, algo alteró la paz y alegría característica en ella, y entonces en un acto de simpatía él la saludó amistosamente, a pesar de su aparente afabilidad ella sintió recelo. Él se había dado cuenta de que Humildad parecía una chica más segura de sí misma, y que siguiera con ese aire de inocencia le encandiló en ese momento, por lo que la invitó a pasear, ella vaciló porque llegaba tarde a la facultad y no era una chica que faltase a las clases, pero finalmente aceptó. Había una parte de ella que seguía confiando en él. A medida que iban andando, Humildad se iba sintiendo más segura con él, se le olvidó lo que le había hecho pasar, desde el principio, en cuanto empezaron la conversación notó a un Orgullo bastante cambiado, parecía que hasta tenía otro tono de voz. También se había olvidado de que estaba perdiendo tiempo de la universidad, en esos instantes, para ella sólo lo estaba invirtiendo, es más, hacía tiempo que no se sentía tan cómoda con una persona tan desconocida para ella.

Al cabo del rato pareció que al intercambiar palabras con Humildad, él ahora estaba descubriendo a otra persona totalmente nueva, diferente de la chica del instituto. Ciertamente la estaba conociendo, pero en su interior el tiempo que había pasado desde el instituto no la había hecho cambiar.

Orgullo estaba actuando con ella, pues sabía que desde que había hecho tanto daño (incluso consiguió que llorara públicamente) a Humildad, ella no iba a aceptar nada en cuanto a él se refiriese y que pudiera poner en peligro su integridad anímica o sentimental. Él ya se estaba dando cuenta de que se había ganado su confianza en esos minutos de paseo, por lo que se le pasó por la cabeza algo realmente tentador: se le ocurrió llevarla a su piso, ya que en esa hora del día sus compañeros no estarían allí, ella no dudó, confió y accedió.

Entraron en el piso, ella simplemente pensaba que se lo mostraría y se iría, y no lejos de sus pensamientos se lo mostró, pero lo que sí le extrañó fue el piso en sí, encerraba algo que no encajaba con el nuevo Orgullo que ahora conocía. Le ofreció un café. Esa amabilidad que ella notaba en él no parecía propia de su apariencia externa, ni siquiera, por extraño que pareciera, de aquel piso en el que él llevaba meses haciendo su vida.

Una vez sentados en el sofá del salón de aquel lugar hablaron de sendas familias, eso en Humildad caló, descubrir esa parte sensible y tierna en él. A medida que pasaban los segundos él notaba que ella confiaba ciegamente en él, y eso le hizo tomar una decisión; la besó. Fue un beso sincero. Ella le entregó su intimidad, se sentía libre, colmada, segura, feliz. Él, ya no era él, la ternura y el amor de aquella acción con Humildad era algo totalmente nuevo para él, no había sentido nunca nada igual, ese hecho le cambió el rostro, le hizo un hombre nuevo.



Desde entonces, aquel chico cambió, en su forma de vida, en su manera de ver las cosas. Se sinceró desde aquel momento con Humildad y ella volcó todo su apoyo sobre él, gracias a todo lo que ocurrió en ese día y lo que fue ocurriendo después empezó a aprovechar sus cualidades para hacer el bien y agradar a los demás. La dulzura y la entrega de Humildad lo habían cautivado.

¿Que no hay milagros todos los días?

Es posible que os parezca un chorrada el cuento (si habéis conseguido leerlo), y más tonto aun el comportamiento final de la chica, ¿verdad? Sin embargo, si nos centramos sólo en esa parte: ¿quién ha salido perdiendo?, ¿y ganando?

A veces no nos damos cuenta de que hay que ceder y reconocer que ciertas personas también pueden transformarse. ¡Qué alegría el poder experimentar una transformación de alguien que parecía perdido! ¿Qué os parece? ¿Hay que/es bueno/es necesario/... dar segundas oportunidades?

¡Feliz Pascua de Resurreción a todos!

jueves, 17 de marzo de 2011

Contrastes

¡Muy buenas! Acabo de ver algo que no me ha dejado nada indiferente y quiero compartirlo con vosotros. Primero me ha llegado un vídeo que os facilito más abajo. Después de verlo me he fijado en otra cosa que me ha llamado particularmente y casi más la atención que lo anterior.

Esto es lo que me he visto en primer lugar:


Esto es lo que llamó mi atención después:


Sólo me queda daros la libertad para que expongáis vuestra opinión. ¡Ánimo! Un saludo.

sábado, 12 de marzo de 2011

De lo espontáneo a la deducción de "la triple f"

En primer lugar, he de decir que he empezado esta entrada sin un tema claro, simplemente ahora, a medida que voy pulsando las teclas del ordenador me van saliendo palabras, una detrás de otra, y que parecen tener cohesión y algo de coherencia. Sigo buscando un tema central que no logro encontrar, por lo tanto creo que hoy no encuentro nada en torno a lo que dirigir palabras que formen un mensaje para llamar vuestra atención, y es que siento la necesidad de ofreceros algo que podáis leer para cumplir con vosotros mi parte de fidelidad y corresponderos a los que tenéis un cierto seguimiento de este espacio,..., bueno, aunque no sé si lo conseguiré creo que voy a hablar precisamente sobre la fidelidad. ¡A ver que sale!:

Pues, creo que debo comenzar por el principio y como ando algo espesito, os dejo la definición de fidelidad según la RAE: fidelidad; "lealtad, observancia de la fe que alguien debe a otra persona." (Algo obvio, ¿no?).

Ahora os pregunto: ¿creéis importante la fidelidad en vuestra vida?, ¿merece la pena ser fiel?, ¿qué nos aporta ser fiel o que nos lo sean?


Supongo que la mayoría valoramos el ser fiel, pero quizá veamos difícil poder ser fiel a alguien siempre, ¿no? Dicho así; siempre parece un poco lejos, puede ser que algunos penséis que no, pero mirad, en especial, hoy día (no sé si antes también, lo lógico es que sí) donde constantemente nos hacen ofertas de todo tipo y de todas las maneras posibles, ¿no es difícil seguir siendo fiel cuando casi sin que nos demos cuenta por medio de la publicidad o fruto de ella se nos abren nuevas opciones de fácil alcance (sean de corta duración o no, pero que no parece importar), con bastante atractivo para cualquiera, y bastante difícil resistirse. Digo tanto lo de difícil porque ser fiel (en cualquier aspecto) es difícil, pero eso también lo hace más maravilloso aun.

Ahora lanzo la misma pregunta, a pesar de lo que se ponga en medio, ¿creéis importante la fidelidad en vuestra vida?, ¿incluso necesaria?. Me tomo la libertad de opinar: creo que según van pasando los años vamos necesitando aferrarnos a personas y creencias que nos vayan aportando estabilidad y felicidad, esto requiere una aceptación y compromiso por nuestra parte, claro está que este compromiso no es pasajero ni caprichoso ni egoísta, sino firme, sincero y liberador, si no, no daría plenitud a la persona.

A veces caemos en el error de pensar (sobre todo jóvenes y adolescentes) que este tema es sólo de adultos, pero de nuestra parte también se pide un compromiso en las cosas que son verdaderamente trascendentes. La madurez te la da la propia fidelidad, no aparece por arte de magia (como hacen ver en reálitis del tipo "Hijos de papá" que aparte de toda la parafernalia que es la televisión intentan convertir a jóvenes que reunen todas la características propias del título del programa en jóvenes maduros), sino que se va cultivando.

Para casi terminar, me gustaría añadir personalmente el recuerdo que me trae hablar de fidelidad; me viene a la cabeza una canción que sonó aquí, en mi pueblo cuando la cruz de los jóvenes pasó por aquí dejando corazones llenos y a la vez inquietos de Dios, pues bien, la canción se titula así: "Tú fidelidad es grande", no sé si la conoceréis o qué os parecerá, sí sé que no es una gran composición musical, pero muestra (de una manera que consigue emocionarme) hasta donde llega EL AMOR MÁS GRANDE.


ÉL es el único capaz de poner esperanza en este mundo, sabiendo la situación actual que vivimos todos.

Por último, ya que he hecho mención a la cruz de los jóvenes, aprovecharé para saludar de manera especial a todos los sevillanos y residentes en Sevilla (puesto que ahí se encuentra la cruz en estos días) y que no dudéis en contagiaros de ese AMOR. Así como también a todos vosotros para desearos mucha felicidad propia y compartida, y amor con los demás.

viernes, 25 de febrero de 2011

Te llaman porvenir porque no vienes nunca

Saludo a todo el que esté leyendo esta entrada, ¿qué menos os merecéis? Después de semanas sin aparecer por aquí vuelvo con nuevas temáticas, esta vez tengo que empezar hablando de economía, algo aburrido, ¿verdad?, pero se terminan sacando unos datos muy curiosos, para muestra un botón:

Os introduzco un término: producto interior bruto (conocido con las siglas PIB), es decir, la suma de todo el beneficio al final de un año de un país (no pasa nada si no lo entendéis muy bien), pues bien el año pasado (2010) España tuvo en ese apartado unos valores de 1.364.499 millones de dólares (990.000 mill. de euros aprox.), para que nos hagamos una idea también os muestro lo que Estados Unidos obtuvo: 14.624.184 mill. de dólares (10.600.000 mill de euros) y el país de actualidad, Libia: 96.099 mill. de dólares (69.650 mill. de euros). De el PIB se pueden sacar muchas conclusiones - si conocemos el número de habitantes del país -, entre ellas el nivel de desarrollo del país, incluyendo la renta per cápita (lo que cobra de media cada persona del país al año). Digo más: la renta per cápita de los países nombrados anteriormente es respectivamente: 30.000 dólares, 47.000 dólares y 15.000 dólares.

Posiblemente esto no os sorprenda mucho, y si además le sumamos que es una mera media aritmética lo del sueldo anual de cada persona, entonces ya aterrizamos un pelín más. Y, por cierto la renta por cápita del mundo está en 10.000 dólares.

No sé si también conocéis la aportación que realizamos los países desarrollados a los subdesarrollados; lo llaman ayuda para el desarrollo y muchos lo conoceréis por el famoso 0,7% que los países más ricos donan a los más pobres. El caso es que esta medida fue adoptada hace 30 años y todavía apenas se cumple, ya que casi ningún país llega a esa cifra por muy corta que os parezca a algunos. Las cifras que se conocen de este año último son de 70.000 millones de dólares donados a estos países (habiendo 100 países que están por debajo de la media mundial), además esta cantidad no es dinero neto.

A qué viene todo esto os preguntaréis, pues allá va:

Os propongo una cosilla, fijen su atención en este dibujo:
Si no lo sabéis o creéis saberlo pulsad aquí, si lo sabéis no es necesario.

(Aquí te dejo en formato de web el libro del cual he sacado esta idea e ilustraciones: El principito.)

Ahora os presento otra imagen, contempladla:
¿Se os ocurre algo de lo que puede haber detrás?, si tenéis curiosidad comprobadlo aquí.

A menudo pensamos en nuestro futuro, es más, hay quienes viven en él, quienes viven según una planificación a medio-largo plazo que cuando llega no sé por qué, pero en ocasiones ni consigue realizarnos. Es decir, estamos anclados en nuestro futuro, quizá por eso tantas veces que se nos presentan imprevistos que tienen más relación con el presente que con el futuro el mundo se nos cae encima y se nos desmoronan planes futuros... No sé si me seguís. En verdad a donde quiero llegar es a que hay personas (muchas) que no pueden pensar en un futuro más lejano que el de plantearse qué es lo que van a comer hoy mismo. Y en ese colectivo de personas encontramos niños (muchos) que apenas con 5 años mueren por no tener que llevarse a la boca, o por el SIDA.

Finalmente, me despido con una canción, como no podría ser de otra forma, sobre el país al que pertenece el mapa de antes; Mozambique: Bob Dylan - Mozambique (un temazo, por cierto). Este país en cuanto a su economía no se puede comparar con los nombrados anteriormente, ya que tiene una renta per cápita de 886 dólares, esto es, de media cada persona vive con apenas 74 euros al mes, y esto aparte del matiz que dan las dichosas medias..., personas que tienen mucho (o muchísimo) más y otras que tienen muchísimo menos (o nada).

Siento tener que comunicaros que en lo que habéis tardado en leer esta entrada más la canción han muerto más de 50 niños de hambre. Creedme "Su mañana es hoy".

¡Intentad sed muy felices!, con lo que ello conlleva.

sábado, 5 de febrero de 2011

Cuando lo bueno es la excepción

Una vez más me dispongo a escribir sobre el mundillo mediático, en esta ocasión dedico este espacio a ese personaje que muchas veces llama más la atención que su propia función: informar. En efecto, estoy hablando sobre los periodista, de estas personas de las que llegamos a depender, ya que son los encargados de saciar nuestra mente deseosa de conocer noticias de actualidad y sucesos (por medio de la televisión, la radio, los periódicos, las revistas o internet) en forma de crónicas, opiniones personales, reportajes, etc.

Desgraciadamente, entre los periodistas parece que últimamente prima más el entretener que el informar, si sabemos que ésta (informar) es su misión, ¿por qué llamamos periodistas a personas que no realizan el trabajo de tal? También es cierto que entretener es bueno en un periodista y uno que entretenga por su manera de informar es algo que tiene ganado. Actualmente el espíritu que se viene viendo es el contrario: primero entretener y captar público y luego, si no desentona mucho, dar datos objetivos, es más hay quienes llegan a inventarse sucesos y enredos, contratar personajes para sus historias (hacer montajes) con tal de causar morbo y polémica. Podría empezar a concretar casos de este comportamiento periodístico, pero seguro que conocéis bastantes por lo que me ahorro la muestra, además a lo que quiero dedicar la mayor importancia en esta entrada no es al lado negativo de la palabra periodismo, sino del  positivo.

Porque no sólo hay periodistas cuya única función (exagerando mucho) parecer ser el degenerar la visión que hay hoy en día del periodismo, y por eso mismo voy a defender la imagen del auténtico periodista: para lo cual voy a ayudarme de otra imagen, de la de Pedro Cárdenas (no os facilito un enlace con información de este hombre porque pretendo que hagáis otra cosa): y como en esta circunstancia una imagen no se cumple lo de que una imagen vale más que mil palabras, para ello voy a dejaros un conjunto conjunto de imágenes que harán de reportaje.

En este reportaje muestra como es la vida de periodistas que al igual que muchos ponen como prioridad en sus objetivos el de informar de la verdad, servíos de este ejemplo pues para daros cuenta del importantísimo papel de periodistas como Pedro, Yoani, y otros muchos anónimos que prueban que existen periodistas eficaces, admirables y entregados.

Termino y me despido con lo necesario para finiquitar el contenido de esta entrada: http://www.rtve.es/mediateca/videos/20100530/portada-maldito-oficio/786200.shtml (este es el enlace necesario para conocer las historias de periodistas de verdad). Siendo esto lo último por mi parte, os animo a que veáis el reportaje y os deseo que seáis muy felices.

viernes, 28 de enero de 2011

LLámalo como quieras

¡Hola a todos! Esta mañana, al igual que todos los años en los días cercanos al 30 de enero, hemos celebrado en mi colegio el día de la PAZ. La verdad es que no esperaba gran cosa, nada especial; todos los años había sido igual, y éste para no variar hasta en el mismo orden; todos lo alumnos reunidos, alguien nos habla de las injusticias del mundo y de lo importante que es que llevemos la paz al ambiente escolar y al final cada curso hacía un compromiso para llevar a nuestro ámbito la paz, que poco a poco iba quedando en el olvido, después leíamos la típica oración de S. Francisco de Asís y al final veíamos los carteles que cada grupo había hecho con letras bonitas donde ponían valores para llegar a la paz, lo típico, ¿no?

Sin embargo, por alguna razón este año, a pesar de ese minuto silencio lleno de toses, a pesar de lograr escuchar bien apenas dos compromisos de los cursos de más arriba, me hice una pregunta en relación a lo anterior (paz, amor, respeto, tolerancia, perdón, fuera el odio...); "¿Y esto se puede cumplir?", el propio Gandhi ya había contestado a esta pregunta tan poco específica y a la vez tanto...: "Si quieres cambiar al mundo, cámbiate a ti mismo". Bonita frase, ¿verdad?, "que buenas intenciones tenía este señor", y que lejos parece de la realidad, pero él lo intentó y lo logró, logró lo que mucha gente había intentado con otros métodos (en los que el simple diálogo no se les pasaba ni por la cabeza), consiguió una serie de derechos de forma pacífica, eso sí, también lo pasó realmente mal y encontró mucha oposición.

"Dicen que soy héroe, yo débil, tímido, casi insignificante, si siendo como soy hice lo que hice, imagínense lo que pueden hacer todos ustedes juntos."

Toda la historia personal de esta persona la podéis conocer en una película bastante verídica a la que podéis acceder pinchando en el enlace con su mismo nombre (Gandhi), sé que estoy abusando al recurrir mucho últimamente a películas, pero son bastante explicativas y disfrutaréis bastante si os hacéis un hueco para ver ésta.

Por otra parte, he de recordar una cosa que ha sido bastante significativa para mí; la lectura de la oración de S. Francisco, la había leído varias veces, pero en esta ocasión parecía tener otro contenido, quizá en otras ocasiones con las prisas no me había fijado en el contenido de la oración, no sé. Ahora os invito a leerla, seáis creyentes o no, ya que es un perfecto resumen de cómo hacer felices a los demás siéndolo uno mismo (con reciprocidad, je, je).

Os puede haber parecido  que el corto contenido de esta entrada ha sido demasiado utópico, pero si el ser humano es tan maravilloso, como habéis opinado la mayoría de los que habéis participado en la encuesta que dejé puesta (no muy representativa ni mucho menos, he de decirlo), sólo con intentar lo que nos recuerdan días como éste merece la pena, ¿no?; y bueno, todo esto no deja de ser lo que he sentido en el día de hoy, junto con la nostalgia anticipada por el último año (éste) que viviré este acto en el colegio y los nervios e inseguridad que he sentido segundos antes de un examen de Biología. Así me despido hasta la próxima, espero tener cosas para compartir con vosotros que os resulten de interés, y si ha de ser acompañadas de vídeos o pelis, no os importa, ¿no?.

Espero que seáis muy felices y bueno, si os entra la cosilla de comentar lo que sea, hacedlo.

viernes, 14 de enero de 2011

Contra la crueldad: empatía y, ¡acción!

¡Buenas a todos!, en primer lugar os mando mis mejores deseos para este nuevo año que comienza. En segundo lugar me gustaría disculparme por lo que me he retrasado en escribir. En esta ocasión mi exposición va a ser fruto de una película que vi hace unos días y que para nada me dejó indiferente (Ben X).

Ésta cuenta la sorprendente historia de un adolescente con síndrome de Asperger. Digo lo de sorprendente por la historia en sí, pero desgraciadamente no me resultó nada sorprendente la irritante vida de un chaval de esta edad con este tipo de enfermedad, ya que por cosas que se le ponen a uno delante en la vida conozco de primea mano cómo es el día a día de personas que tienen diagnosticado dicho síndrome, y os puedo asegurar que la peli, en mi caso que tengo cercano no se aleja mucho de la realidad (salvo en escenas en las que el director dejó volar mucho la imaginación y le salen cosas que dejan bastante sorprendido al televidente se centra muy bien en las situaciones que puede vivir un chico así).


La crueldad de las personas, la falta de empatía y escrúpulos es lo que más resalta el director. Tengo que decir que es bastante difícil ponerse en el lugar de estos chavales porque además a ellos les cuesta horrores ponerse en el nuestro, aun así es posible que os quedéis incrédulos en algún momento de la peli. Terminando de hablar de la película, debo añadir que es algo durilla, pero bastante recomendable por no muy lejos de la realidad muestra de una manera bastante fidedigna el caso. Puede que alguno os veáis o veáis a otras personas reflejados en algún personaje de la película, yo he de reconocer que viéndola me identifiqué con alguno. Aquí abajo os dejo un enlace directo para ver la peli:

http://www.cinetube.es/peliculas/drama/ben-x_espanol-dvd-screener-megavideo-32735.html

Después de conocer hechos parecidos a esto uno puede preguntarse como nos podemos tratar tan mal unos a otros (de manera significativa en la infancia y adolescencia). Y es que, ¿vamos a permitir que tengan razón las personas que afirmaron que "el hombre es un lobo para el hombre"?, mi enrabietada reacción es "no".

De nosotros depende hacer la vida más feliz a los demás, por ello somos todos somos responsables de que personas como Ben, o cualquiera que seguro conocéis que necesite algo de atención y cariño se sientan bien especialmente consigo mismos.

Espero que hayáis entendido mi exposición, a esto tengo que añadir también que en el caso de que veáis la película (sólo haciendo click arriba si precisáis de algo de tiempo) sobra todo lo que haya podido decir acerca del tema este. Como siempre espero que seáis muy felices, y hasta la próxima, que anuncio que será una composición literaria que publicaré en este sitio en cuanto pueda.